Las nueces de cajú, también conocidas como anacardos, son un fruto seco tan consumido como las almendras o los cacahuetes, probablemente todos la hayamos probado en algún momento.
Por si no lo habías notado, este fruto jamás se vende con cáscara, en cambio las nueces, las almendras, los cacahuetes, los pistachos, etc. las podemos encontrar a la venta con su cáscara y no hay problema con ello.
El motivo por el cual se les quita la cáscara a las nueces de cajú es porque pertenecen a la misma familia que la hiedra venenosa, es decir, contiene un químico llamado urisiol que puede ser muy dañino para la salud.
Por ello la industria que vende este fruto seco, debe tener mucho cuidado con el proceso de recogida y limpieza de este fruto seco. En ciertos lugares, donde la leyes sanitarias no son muy estrictas, este procedimiento se sigue haciendo a mano, lo que implica un mayor riesgo de infección.
También habrás notado que esta nuez siempre se vende cocinada, fritas o cocidas, para evitar que queden restos del veneno en el fruto. .
El siguiente vídeo nos explican la procedencia de la nuez de cajú o anacardo y las consecuencias de venderlo sin pasar por el tratamiento mencionado anteriormente.
No cabe duda que nunca dejamos de aprender.