Hay especias que no sólo se pueden usar en la preparación de comidas, sino que suelen quedar muy bien con recetas dulces, tal es el caso del bizcocho de naranja y laurel.
Los cítricos combinan de una manera increíble con los aromas del campo mediterráneo, además el laurel huele de maravilla así que le aporta a esta receta un toque único que estamos seguros querrás probar con otros postres.
Ingredientes
- Mantequilla sin sal 80 g
- Laurel 10
- Harina de repostería 230 g
- Azúcar 160 g
- Levadura química 5 ml
- Sal 2 g
- Huevos 3
- Queso fresco batido desnatado o yogur 125 g
- Esencia de vainilla 2 ml
- Naranjas 1
- Azúcar glasé 125 g
Cómo hacer bizcocho de naranja y laurel
- Tiempo total: 2 horas
- Elaboración: 15 minutos
- Cocción: 45 minutos
- Reposo 1 hora
Paso 1: Derretir la mantequilla en un cazo, añadir 3-4 hojas de laurel. Dejar enfriar mientras se infusiona durante unos 30-60 minutos.
Paso 2: Precalentar el horno a 180ºC y engrasar un molde redondo o de anillo. Retirar las hojas de laurel, escurriendo bien la mantequilla, y desechar.
Paso 3: Disponer en un recipiente mediano la harina con el azúcar, la levadura química y la sal, y mezclar con unas varillas. En otro cuenco, batir la mantequilla derretida con los huevos, el queso fresco batido o yogur, la vainilla y la ralladura de la naranja. Incorporar esta preparación a la harina y mezclar bien, con suavidad, hasta tener una masa homogénea sin grumos secos.
Paso 4: Llenar el molde con la masa, igualando la parte superior con una espátula o el dorso de una cuchara. Repartir por encima el resto de las hojas de laurel, presionando muy ligeramente.
Paso 5: Hornear durante unos 40-50 minutos. El tiempo final dependerá del tipo de molde, mejor ir comprobando el interior pinchando con un palillo o brocheta.
Paso 6: Esperar unos minutos fuera del horno, desmoldar con suavidad y dejar enfriar completamente sobre una rejilla.
Paso 7: Preparar el glaseado batiendo con unas varillas el azúcar glasé y 1-2 cucharadas de zumo de la naranja colado, hasta tener una consistencia densa y viscosa. Repartir encima del bizcocho frío y dejar secar.
Con qué acompañar el bizcocho de naranja y laurel
Este tipo de preparaciones son perfectas para los desayunos y meriendas, aunque el bonito aspecto que le da el glaseado y las hojas de laurel lo convierten también en un postre perfecto.
Te recomendamos guardarlo a temperatura ambiente en un recipiente hermético, ya que si se mete a la nevera el glaseado se humedecerá.
Esperamos que te animes a preparar este postre tan especial. Comparte esta receta con tus amigos.