La cebolla es una verdura llena de minerales y oligoelementos como el calcio, magnesio, cloro, cobalto, hierro, potasio entre otros. Por otra parte contiene cuantiosas cantidades de vitaminas A, B, C y E, así mismo la cebolla está compuesta por un 91% de agua, un 7% de glúcidos y un 1% de proteínas.
Sus múltiples beneficios para la salud y la enorme versatilidad a la hora de cocinar, la convierten en un infaltable de cualquier receta. Por ello queremos enseñarte una deliciosa forma de disfrutarla que no te tomará mucho tiempo y será tu snack estrella en reuniones con amigos y familiares.
Aros de cebolla
Ingredientes para dos porciones:
Instrucciones
Pelar y cortar la cebolla en aros. Cuando hayas cortado la cebolla, separa bien los aros y colócalos en un bol con agua bien fría hasta cubrirlos. Deja reposar 10 minutos.
Mientras, bate en un bol la yema de huevo. A continuación, ve añadiendo poco a poco la leche sin dejar de batir. Reserva.
En otro bol, tamiza y mezcla los ingredientes secos. Esto quiere decir la harina, la levadura y la sal. Revuelve todo bien para que se repartan de forma uniforme.
Ahora añade la cucharada de aceite al bol con los ingredientes secos y ve mezclando suavemente. Para terminar con nuestra masa de rebozado crujiente, incorpora la yema con la leche que teníamos en reserva y mezcla todo hasta conseguir una mezcla homogénea y sin ningún tipo de grumos.
Calienta una sartén con suficiente aceite y mientras, escurre bien los aros de cebolla.
Cuando el aceite esté en su punto, baña los aros de cebolla en la mezcla y fríelos de inmediato hasta ver que quedan crujientes. Retira a un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
¿Te animas a preparar estos ricos aros de cebolla?