La pizza es uno de los alimentos “chatarra” más consumidos por las personas. Es una forma cómoda de calmar nuestra hambre ya que podemos pedirla a domicilio, y si deseas prepararla tampoco te quitará mucho tiempo. Sin embargo, una pequeña porción contiene una gran cantidad de grasas y carbohidratos que arruinan cualquier tipo de dieta equilibrada y sana.
No obstante, este alimento se adapta perfectamente a la pirámide nutricional ya que en su masa podemos encontrar los carbohidratos que están en la base. En cambio las frutas, verduras, proteínas y lácteos están en el segundo y tercer piso de esta pirámide, según detalla el medio “La Vanguardia”
A pesar de contar con ese punto a su favor, esta invención italiana podría ser todo menos saludable. Es más, el valor calórico de solo una porción de pizza (con salsa de tomate y queso) es de unas 237 calorías: un 38% de grasa, 44% carbohidratos y 18% de proteínas.
La pregunta es: ¿Podemos comer pizza y mantenernos “saludable”?
Aunque la actividad física juega un rol muy importante al igual que el estado de salud de quien la come, también es importante considerar las porciones y los ingredientes con que se prepara.
Según medio español, existen formas para que comer pizza sea una experiencia saludable:
Pizza en mi dieta
Lo primero es que la pizza no puede ser el pilar fundamental de mi dieta. Debemos darle prioridad a las frutas y verduras, de las que debemos consumir cinco porciones al día.
Ingredientes de calidad
Lo recomendable es utilizar ingredientes vegetales en abundancia, tomates de calidad y restringir al mínimo los embutidos y quesos demasiado mantecosos.
Tamaño de la ración
La cantidad que podría considerarse dentro de los rangos de saludable sería un par de trozos, no una pizza familiar completa. Además, se debe comer solo una vez a la semana y acompañada de un plato de ensalada de frutas o verduras.
Ya sabes, puedes disfrutar de una rica pizza sin arruinar tu dieta.