Indudablemente, muchas veces has oído decir que durante el día debes tomar unos cuantos vasos de agua. Es un hábito saludable, no hay cuestionamiento a eso. Sin embargo; es mejor beber agua tibia en lugar de fría, porque tiene una serie de consecuencias significativas en los distintos Sistemas del organismo.
Delicias.tv te contará sobre dichas razones.
Consecuencias en el sistema digestivo
El agua fría favorece a la solidificación de la grasa que contiene la comida y, por ende, ralentiza la digestión.
El agua tibia, al contrario, apoya rápidamente la digestión de la comida, lo que tiene un buen efecto en la filtración y ayuda a reducir la constipación o estreñimiento.
Consecuencias en el sistema respiratorio
El agua fría estimula la acumulación de la mucosa, lo cual amplía el riesgo de las infecciones del sistema respiratorio y puede causar la inflamación de la garganta.
El agua tibia tiene el resultado contrario: suaviza la garganta y alivia la irritación. Es ventajosa durante las enfermedades respiratorias, como también simplemente por la mañana para eliminar la sequedad en la boca.
Consecuencias en el sistema sanguíneo
El agua fría provoca la constricción de los vasos sanguíneos.
Cuando bebes agua caliente, los vasos sanguíneos se dilatan y, como resultado, mejora la circulación sanguínea en los órganos y tejidos. Debido a esto, tu organismo elimina las toxinas de manera más rápida y eficiente.
Consecuencias en el sistema nervioso
Las bajas temperaturas son uno de los componentes que acrecientan el riesgo de dolor de cabeza. Las investigaciones han demostrado que un efecto similar tiene también el agua fría, que puede provocar ataques de jaqueca en las personas que padecen de esto.
El agua caliente, por el contrario, aplaca el dolor. Es buena especialmente para ayudar a eliminar los temblores.
¿Ya vas por un vaso de agua tibia?
