El aceite o esencia de mandarina que se extrae de su cáscara, tiene propiedades antisépticas, antiespasmódicas, depurativas, sedantes, digestivas y tónicas porque favorece el buen metabolismo, la descomposición de alimentos y la absorción de nutrientes.
También se le conoce por tonificar todas las funciones del organismo y promover la secreción de enzimas y hormonas así como de mantener a la persona alerta y activa, fortaleciendo el sistema nervioso.
Es usado para curar heridas y evitar contagio por gérmenes, se aplica externamente sobre la zona afectada o por vía oral. También favorece la circulación de la sangre y la salud del corazón, así como evita complicaciones asociadas a la mala circulación.
El aceite de mandarina genera un efecto sedante para el organismo y su consumo, vía oral, es recomendado para relajar los nervios, combatir tensiones, reducir la ansiedad y estrés, las alergias, la hipersensibilidad, la depresión y la ira.
El aceite de mandarina contiene innumerables beneficios para salud, por lo cual es siempre recomendable tenerlo en casa e incluirlo en la rutina diaria para mantener una excelente salud.
Comparte con tus amigos