Es muy común que después de haber limpiado durante horas y tras haber dejado impecable tu casa sientas un desagradable olor a cloacas. Quizás te preguntes por qué no logras eliminar definitivamente ese olor tan persistente. La respuesta es simple, no se trata de una cuestión de limpieza, sino de que la suciedad que se acumula en las cañerías y en las tuberías despide un olor nauseabundo que finalmente invade todos los rincones de tu casa.
Los restos de comida, la calidad del material de las tuberías e incluso los mismos jabones que utilizamos para limpiar van formando montañas de desechos que con el tiempo no sólo tapan las cañerías y terminan por romperlas, sino que también provocan estos olores que nadie quiere tener en sus casas.
Entonces nos enfrentamos a un gran problema, ya que eso es algo que no es sencillo de limpiar pero que inevitablemente tendrás que hacer. La grasa y suciedad acumulada debe eliminarse para que tu casa no siga oliendo como el baño público.
Te contamos un sencillo truco que hará que te ahorres ese dinero que gastarías en llamar a un plomero. Para preparar este limpiador casero vas a necesitar:
- 2 litros de agua caliente
- 250 ml. de vinagre de alcohol
- 150 gr. de bicarbonato de sodio
Preparación:
Calienta el agua en un recipiente y cuando rompa el hervor agrega el vinagre. Revuelve con una cuchara de madera y deja que siga hirviendo durante unos minutos más.Mientras, arroja el bicarbonato de sodio en las tuberías atascadas y sucias y a continuación, vierte en el lugar el agua con el vinagre.
El agua caliente aflojará la suciedad mientras que el bicarbonato y el vinagre harán el trabajo de disolver y limpiar. No dejes correr el agua de las canillas durante toda una noche luego de haber hecho esta limpieza para que los ingredientes actúen durante todas esas horas.
Por la mañana, deja correr el agua preferentemente caliente, durante un rato para realizar un último enjuague en las tuberías y terminar de arrastrar la suciedad.
Notarás como los malos olores desaparecen de la noche la mañana, pero en caso de que sea necesario puedes volver a repetir la operación. Recuerda que estas tuberías deben ser limpiadas de esta manera cada tanto para evitar que nuevos desechos vuelvan a acumularse y a generar malos olores.