El aceite de girasol o maravilla y el aceite de oliva son dos de los aceites más populares y consumidos en todo el mundo. El primero no tiene la misma fama que el segundo, el cual es considerado como el oro líquido y forma parte de la dieta mediterránea. Las dudas que suelen aparecer en la cabeza de todo el mundo son las siguientes: ¿Se merece el aceite de girasol toda su mala fama? ¿Entonces es mejor freír con aceite de oliva?
La gente piensa que el aceite de girasol solo se puede utilizar para cocinar, mientras que el de oliva es mejor para las ensaladas, porque freírse unas papas o hacer croquetas con él es un sacrilegio. Realmente, esto no es verdad, ya que precisamente el aceite de girasol es más beneficioso si se toma crudo y hay aceites de oliva que son más baratos que el virgen extra.
El aceite de oliva tiene una mejor fama que el de girasol debido a que es un básico en la dieta mediterránea, la cual está considerada como una de las más equilibradas y sanas que existen. De hecho, algunas variedades de este aceite son vendidas a un precio que no todo el mundo se puede permitir. Sin duda, es un alimento muy nutritivo.
El que se le tenga menos afecto al aceite de girasol se debe a que no soporta tan bien las altas temperaturas y se quema antes, liberando sustancias dañinas para el organismo. En cambio, si consumimos el aceite de girasol crudo, es tan beneficioso como el de oliva. Ambos son una fuente de nutrientes, como las grasas buenas, los ácidos grasos como el ácido linoleico y el ácido oleico, o la vitamina E.
Beneficios del Aceite de Oliva
1. Propiedades antibacterianas: El aceite de girasol es un gran antibacteriano particularmente eficaz contra el Helicobacter pylori, una bacteria que puede causar cáncer de estómago y úlceras. De este modo, nos ayuda a cuidar nuestro aparato digestivo.
2. Aumenta el PH del organismo: Al aumentar los niveles de pH de nuestro organismo, facilita la absorción correcta de magnesio y calcio.
3. Ayuda a nuestras articulaciones: El aceite de oliva ayuda a reducir el dolor articular y la hinchazón de la artritis reumatoide, algo que se ve favorecido por el consumo de alimentos ricos en Omega 3. Además, también combate la osteoporosis.
4. Beneficioso para el cerebro: El aceite de oliva contiene polifenoles, los cuales potencian el nacimiento de neuronas, y ayuda a aumentar el desarrollo cerebral. Por otro lado, previene de enfermedades como el Alzheimer.
5. Más beneficios: Ayuda a aumentar las funciones cognitivas, potencia las funciones metabólicas, previene la diabetes, ayuda a lucir una piel más sana y nutrida, previene las enfermedades del corazón reduciendo el colesterol y mejora el sistema inmunológico. Por si fuese poco, además ayuda a mantenerse en un peso ideal y a adelgazar.
Beneficios del Aceite de Maravilla o Girasol
1. Antiinflamatorio: El aceite de girasol tiene efectos antiinflamatorios que lo hacen ideal para aquellas personas que sufren artritis o síndrome premestrual.
2. Beneficios para el corazón: Este aceite ayuda a mantener el corazón sano, ya que tiene grasas y fitoesteroles saludables. Además, mejora la circulación y reduce el riesgo de sufrir un infarto de miocardio. Sus grasas ayudan a nivelar el azúcar en sangre y, junto a los fitoesteroles, disminuyen el colesterol malo.
3. Combate las infecciones y protege la piel: Si se aplica directamente sobre la piel, el aceite de girasol forma una capa protectora que evita que la humedad se escape. Además, ayuda a combatir infecciones y la aparición de hongos. Gracias a la vitamina E, mantiene las células hidratadas ya que este nutriente ayuda a que éstas acumulen agua.
4. Ayuda a prevenir el cáncer: El aceite de girasol protege a las células del cáncer que provocan los radicales libres. Al tener vitamina E, ayuda a prevenir el cáncer de colon, más concretamente.
5. Contiene vitamina E: Su contenido en vitamina E ayuda a prevenir, además del cáncer, otras enfermedades como el asma o la artritis reumática. Además, la vitamina E protege a nuestro cerebro del Párkinson.
6. Mejora del rendimiento sexual: Al tener un alto contenido en zinc, se trata de un alimento que mejora el rendimiento sexual tanto de los hombres como de las mujeres.
Resumiendo, podemos decir que el aceite de oliva es el mejor aceite que tenemos para cocinar, pero el aceite de girasol ocupa una segunda posición y no debe ser infravalorado. El sabor del aceite de girasol es más suave y por ello solemos preferir el de oliva para aderezar alimentos como el pan, las papas cocidas o las ensaladas. Sin duda, el preparar la comida utilizando uno u otro hace que el sabor sea diferente.
Para cocinar, en definitiva, resulta mejor el aceite de oliva ya que soporta temperaturas más altas que el de girasol, unos 200ºC aproximadamente. Además, se degrada más lentamente, lo que hace que se pueda reutilizar más veces sin que produzca daños a nuestro organismo, y se dilata más, por lo que con menos cantidad suele ser suficiente.
Por otro lado, el aceite de oliva es menos absorbido por los alimentos que los demás aceites. Realmente, en esto empata con el aceite de girasol alto oleico, el convencional suele ser mucho más absorbido y dejará la comida más grasa.
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