Comer es lo mejor de la vida, ¿no? Pero comer por ansiedad es un hábito difícil de romper, es casi una pesadilla, ya que la comida no es algo de lo que se pueda prescindir. Por eso te traemos hoy estos tips, publicados por la revista Time, para que puedas reforzar tu voluntad y sentirte bien tanto física como mentalmente.
Comer sacia nuestro apetitito y calma a la vez. El problema surge cuando usamos esto para “saciar” nuestras situaciones de estrés y una vez que el momento de relajación se acaba, comienza la culpa y otras sensaciones negativas que vuelven a causar estrés y se cae en el mismo círculo vicioso. ¿Qué podemos hacer?
1. Cambia el foco de atención
Cuando comiences a sentirte presionado y tu cabeza automáticamente comienza a pensar en comida, busca hacer otra cosa, cambia el foco de tu atención, distráete. Algo muy simple de hacer es aprovechar y llamar a alguien, eso te mantendrá entretenido y te obligará a prestar atención a la conversación.
2. Registra los momentos de debilidad
Cuando esto ocurra, lleva contigo una pequeña libreta y describe qué sientes, el momento y la situación. Esto te permitirá identificar cuáles son esos instantes de debilidad y te hará consciente pudiendo tomar medidas o armas para que cuando estén por su suceder puedas preverlos de un modo más sano.
Es probable que al principio te cueste pero verás que es un gran recurso.
3. Come conscientemente
Comer resulta algo tan automático que pocas veces tomamos conciencia de ello. Comes tan rápido o pensando en otra cosa, que luego notas que tu plato está vacío y ni cuenta te diste de eso.
Concéntrate en tu comida, come lento disfrutando cada sabor y textura. Según el profesor de psicología de la Universidad Estatal de California, el Dr. Edward Abramson, “cuanto más consciente es uno de su comida, mayor es la fuerza de voluntad”.
4. Sí… hay que hacer ejercicio..no hay más opción
Esto no es nada nuevo para ti, conoces todos los beneficios que brinda hacer ejercicio. No es necesario que dejes tu vida en el gimnasio, sólo busca hacer alguna actividad que te guste, esto no sólo beneficiará tu cuerpo sino que te calmará reduciendo tus niveles de ansiedad.
5. Por último…. duerme bien
Está comprobado que las personas con falta de sueño comen en exceso. Por lo tanto, organízate para dormir la cantidad de horas necesarias que tu cuerpo necesita. Si dormir te cuesta, ten presente el punto anterior, haz ejercicio antes de dormir; esto y una buena ducha hará que tu cuerpo y tu mente se relajen logrando descansar sanamente.
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