Las tortillas de papas son, tal vez, una de las primeras recetas que todo aspirante a cocinero debería aprender a hacer.
Esta tortilla tiene dos toques especiales, la papas se van a cocinar partiendo por aceite frío para conseguir un confitado que las haga más cremosas y la cebolla se va a caramelizar y añadir después a las papas.
Ingredientes (4 personas)
- Papas 700 g
- Cebolla 300 g
- Huevos 6
- Sal
- Aceite de oliva
Preparación
- Pelar la cebolla y cortarla en juliana. Después la ponemos en una sartén a fuego muy lento y dejamos que se haga muy despacio, removiendo de vez en cuando. Caramelizar la cebolla por unos 30 minutos.
- Mientras pelamos las papas y las cortamos en rodajas finas, procurando que todas ellas sean de tamaño uniforme. Las dejamos en agua durante 15 minutos y ponemos una sartén con aceite de oliva abundante en el fuego.
- Sin dar tiempo a que el aceite se caliente, añadimos las papas y dejamos que se vayan friendo muy despacio, partiendo de un aceite casi en frío. Así conseguimos que las patatas se confiten en lugar de dorarse.
- Cuando lleven unos diez minutos y hayamos removido de vez en cuando, podemos subir el fuego para conseguir que algunas de las patatas queden más tostaditas, originando así contrastes en el plato final.
- Sacamos las papas y las escurrimos bien del aceite y las ponemos en un bol grande.
- Escurrimos la cebolla cuando esté en su punto, y la ponemos sobre las papas.
- Batimos los huevos y los añadimos al bol, removiendo con un tenedor para que se mezclen bien los tres ingredientes.
Cuajamos la tortilla en una sartén con una cucharada de aceite durante unos tres o cuatro minutos y le damos la vuelta.
La tortilla de papas se pueden acompañar con una ensalada de tomate y pepino, convirtiéndolo en un delicioso almuerzo. Además es ideal también en frío para hacer bocadillos, aperitivos o tentempiés, si se corta en taquitos.
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