El cheesecake es un pastel realizado a base de queso crema que puede combinarse con muchos ingredientes diferentes. Además, puede utilizar o no cocción, por lo que es una alternativa fácil para preparar un postre delicioso en poco tiempo.
Esta receta de cheesecake helado de menta no utiliza cocción, haciéndola siempre una opción original para disfrutar de un postre dulce y refrescante.
INGREDIENTES
- 1 paquete de galletitas de menta y chocolate
- 230 gramos de queso crema
- 1 tarro de leche condensada
- 2 cucharaditas de extracto de menta
- Colorante verde vegetal (solo si lo deseas)
- 230 gramos de crema batida
1. Cubre un molde de torta con unas gotas de aceite para que no se pegue la preparación. También puedes utilizar papel mantequilla.
2. Procesa las galletitas hasta obtener migas pequeñas humedecidas por su propio relleno.
3. Coloca las migas en la base del molde para tortas. Debes repartirlas de manera uniforme. Puedes ayudarte presionando hacia abajo con una espátula.
4. Con una batidora mezcla el queso crema durante 3 ó 4 minutos hasta que quede muy cremoso. Luego, añade la leche condensada y continúa mezclando por 2 ó 3 minutos más.
5. Aparte, mezcla el extracto de menta con el colorante vegetal verde hasta lograr la intensidad de la tonalidad que más te guste. Si prefieres no utilizarlo el relleno será blanco y no habrá problema.
6. Incorpora a la preparación anterior de queso crema batida, la mezcla de colorante con el extracto, integrando bien con una espátula.
7. Vuelca la preparación sobre la base de galletitas, de manera que quede bien uniforme. Llévalo al congelador durante toda la noche o por 8 horas.
¡Y listo!
Al siguiente día está listo para consumir y disfrutar de su exquisito sabor.
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