Existe un nuevo chile o ají más picante del mundo: el “Aliento de Dragón”. Si piensas que nadie puede morir por comer ají, ahora te contamos que, ciertamente, ya es una posibilidad para quienes lo prueben.
Mike Smith, dueño de Tom Smith’s Plants en el Reino Unido, cultivó este chile en conjunto con investigadores de la Universidad de Nottingham. El nuevo ají que ha batido todos los récords, es tan nocivo que ellos mismos aconsejan no comerlo, ya que pudiese ser lo último que pruebes en toda tu vida.
La pregunta que todos nos hacemos es cómo es que un chile o ají puede llegar a provocar la muerte
Existe un químico que libera la sensación de picante cuando comes chile, llamado capsicina y se mide en unidades. Veamos las estadísticas de picante de los ajíes: el Aliento de Dragón es tan picante que llega a los 2.48 millones de unidades en la escala de Scoville , que es una medida de concentración de capsicina.
El actual poseedor del récord como ají más picante es el Carolina Reaper que contiene un promedio de 1.6 millones de unidades en la escala de Scoville. Incluso los gases pimienta que utiliza la milicia estadounidense tienen 2 millones de unidades en la escala de Scoville. Con todos estos datos, se puede deducir que comer un chile “Aliento de Dragón” sería mucho más perjudicial que poner gas pimienta en tu boca.
El Aliento de Dragón es tan potente que lo conservan en un contenedor hermético cuando va a exhibiciones.
Si existe alguien tan valiente como Smith que quiera consumir este chile extraordinariamente picante, lo primero que sentiría sería adormecimiento en su boca, según cuenta el profesor de horticultura de la Universidad Estatal de Nuevo México y director del Instituto del Chile (sí, existe), Paul Bosland. Lo que se produce porque los receptores en la boca mandan la señal al cerebro de que hay dolor y como consecuencia, el cerebro produce endorfinas para bloquear dicho dolor.
Sin embargo; los ajíes que son demasiado picantes actúan más allá del adormecimiento de la boca. Al consumir uno de estos chiles puedes presentar reacciones cutáneas como ampollas en las áreas expuestas a la concentración de capsicina, incluyendo la boca y la garganta. La función de dichas ampollas es ayudar a absorber el calor de la capsicina.
Ni siquiera las ampollas son suficiente para frenar a la capsicina cuando se trata de los ajíes muy picantes y ésta sigue activando los receptores al final de los nervios debajo de las heridas, lo que puede provocar una dolorosa sensación de quemaduras durante unos 20 minutos, apróximadamente. También se puede producir un vómito tan violento que derive en un desgarro en el esófago.
Incluso el sistema inmunológico puede sobrecargarse con ésta alta concentración de capsicina. Esto se produce porque los receptores de TRPV1 (proteínas al final de los nervios que detectan el calor ) se activan con la capsicina e interpretan de manera errada a la sustancia como una señal de calor extremo.
En los peores casos, todo puede llevar a un shock anafiláctico, quemaduras graves e inclusive el completo cierre de las vías respiratorias, lo que, obviamente, podría causar la muerte si no se trata de forma inmediata.
Afortunadamente, Smith no pretende que el “Aliento de Dragón” sea utilizado para la ingesta, él explica que lo cultivó para ser utilizado como anestesia de adormecimiento tópico, especial para personas que son alérgicas a la anestesia común.
¿Qué te parece este tipo de Ají…vas a probarlo?
