Sabemos que todo lo que consumimos a lo largo del día influye en la forma en que nos sentimos y actuamos. Como ejemplo, si consumimos pocas calorías perdemos energía y resulta muy difícil trabajar. Por el contrario, si recibimos demasiadas calorías, ganamos peso extra que pone en peligro nuestra salud y aumenta el riesgo de ataques al corazón.
Si no lo habías pensado, te contamos que los hábitos de nutrición los recibimos de nuestros padres, es por eso que si tienes hijos es importante acostumbrarlos a comer alimentos saludables y a elegir sólo aquellos platos que contienen suficientes minerales, vitaminas, nutrientes y dejar de lado la comida chatarra.
Enseña a tus hijos a preferir alimentos a la parrilla, asados o al vapor
Ya sea si comen en casa o en un restaurante, es mejor elegir platillos a la parrilla, asados o al vapor. Estas formas de cocinar son las más saludables. Si comes fuera, elige un restaurante con un menú infantil. Por lo general tienen más opciones de alimentos saludables que serán buenas para tus hijos.
Prefiere los ingredientes más sanos
Es mejor evitar el chocolate de leche y reemplazarlo con chocolate amargo que contenga como mínimo un 70% de cacao. Utiliza 3 cucharadas de mantequilla sin sal en lugar de ½ taza de mantequilla. Incluso puedes agregar un poco de aceite de aguacate. El sabor será casi el mismo, pero estarán recibiendo grasas saludables.
En lugar de harina blanca de uso general, usa harina integral de trigo.
Puedes reemplazar 1 taza de azúcar con ¾ taza de azúcar de palma de coco. De esta manera estarás consumiendo 130 calorías menos.
Incluye muchas más frutas y verduras a su dieta.
Diversos estudios han demostrado que las personas que comen verduras y frutas todos los días tienen un 30% menos de posibilidades de tener un ataque al corazón. Tienen pocas calorías, por lo que puedes comer tantas como desees sin la preocupación de subir de peso, además son ricas en nutrientes que ayudan a controlar tu presión arterial.
Dejar de comer no te hará bajar de peso
Si no consumes suficientes calorías, porque no quieres subir más de peso, tu cuerpo no recibirá todos los nutrientes necesarios y empezarás a sentir un hambre constante. La mejor solución empezar a hacer ejercicios físicos. El entrenamiento te ayudará a mantener tu cuerpo, ya que se queman calorías adicionales.
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