La mayor parte del tiempo hacemos cosas habituales tal y como nos las enseñaron la primera vez. Ni siquiera se nos ocurre que todo podría ser mucho más sencillo si aplicamos un poco de imaginación. Como en cualquier tarea, para un avance solo tienes que mirar todo desde un ángulo diferente.
El día de hoy leerás la selección de tips o trucos que hemos preparado para ti. Son 19 consejos universales que te ayudarán a manejar con mayor destreza el arte de la cocina.
1. Cómo salvar una sopa si te pasaste con la sal
Hay muchas maneras. Por ejemplo, puedes introducir en la sopa una gasa con un poco de arroz y cocerlo: este absorberá el excedente de sal. Otro truco es meter en la olla una cuchara con un terrón de azúcar: cuando este comience a derretirse, retira la cuchara y repite el procedimiento con otro terrón.
2. Cómo hacer la carne vacuna tierna
Si tu objetivo es preparar un bistec y no una chuleta, entonces, para que la carne vacuna esté más blanda, es necesario aliñarla con mayonesa antes de cocinar.
3. Maíz
Si te sobra una mazorca de maíz hervido puedes utilizarla para una ensalada. Para ello, tan solo basta con cortar granos de maíz con un cuchillo afilado.
4. Para conservar el rico sabor del platillo
Calienta los platos antes de servir platillos calientes y enfríalos si quieres servir uno frío. Este pequeño truco te ayudará a conservar el rico sabor y frescura del alimento.
5. Para separar fácilmente la yema
En lugar de los accesorios de cocina de moda para separar la yema de la clara, puedes utilizar una simple botella de plástico.
6. Leche y puré de papas
Para hacer un puré de papas nunca se debe añadir leche fría. Esto lo vuelve gris. Un buen puré saldrá si la leche se lleva a ebullición y se agrega caliente.
7. Delicioso hielo
Puedes preparar un delicioso condimento para platillos si picas hierbas aromáticas en los moldes para hielo y les añades aceite de oliva. Además, puedes hacer un sabroso hielo para bebidas con rodajas de limón, naranja, hojas de menta y trocitos de frutos del bosque.
8. Vino congelado
De la manera descrita anteriormente, es posible congelar el vino y luego usarlo en experimentos culinarios.
9. Si el pan comienza a ponerse duro
Hay muchas maneras de preparar un platillo de pan, además de hacer los sándwiches habituales. Uno de ellos es el pan de queso, un gran platillo que se prepara rápido y para toda la familia a la vez.
10. Para conservar las verduras
Para conservar más tiempo, por ejemplo, el apio y el brócoli, puedes envolverlos en papel de aluminio.
11. Para recalentar la pizza
Para que una pizza fría recobre su aroma y sabor fresco, puedes calentarla en una sartén y no en un microondas.
12. Para que la palta no se ponga negra
Las paltas no se ennegrecen por la zona donde se han cortado si se salpican un poco de vinagre de manzana y se guardan con un trozo de cebolla cortada.
13. Cómo hacer que cualquier cuchillo sea cómodo para cortar
Para asegurarte de que el mango del cuchillo no resbale al cortar, simplemente coloca varias gomas para oficina a lo largo de la longitud del mango.
14. Un sustituto de la mayonesa
Si de repente se te agotó la mayonesa, pero tienes crema de leche o yogur griego en el refrigerador, puedes fácilmente preparar una salsa que la sustituya. Simplemente, mezcla la crema o el yogur con un huevo duro y una cucharada de mostaza.
15. Si las cebollas cortadas se estropean
Las cebollas cortadas conservarán todo su frescor si las pones en un plato sobre una capa de sal. También puedes envolverlas con papel film o rociarlas con aceite y guardarlas en un recipiente.
16. Quitar el olor de la vajilla
Si los platos han conservado el olor a pescado o cebolla, se deben enjuagar con agua y vinagre para que desaparezca.
17. Café en una turca
Para que el poso de café se quede en el fondo de la turca, debes agregar una cucharadita de agua fría y esperar medio minuto. Y luego sirve el café en una taza.
18. Para mantener el pan fresco
El pan permanecerá fresco por más tiempo si en el recipiente donde lo guardas colocas un trozo de manzana
19. Papas crujientes
Las papas fritas salen deliciosas y crujientes si primero las secas con una servilleta de papel o las pones un rato en el microondas y, recién después, las fríes.
