En las montañas de Pakistán podemos encontrar el ingrediente mineral conocido como la sal rosada del Himalaya. Es en la mina Khewra, una de las más puras de todo el planeta, donde se obtiene principalmente.
Este producto se comenzó a comercializar exitosamente en varios países europeos, americanos y asiáticos gracias a su alto valor nutricional, que brinda grandes beneficios al organismo.
Posee 84 compuestos saludables para el cuerpo y es una fuente principal de electrolitos y oligoelementos que contribuyen a mejorar el funcionamiento de varios sistemas vitales de nuestro cuerpo. De hecho, gracia a su interesante composición, también tiene aplicaciones cosméticas y terapéuticas. Es especial para relajar el cuerpo y renovar nuestra piel.
La mayoría de la gente, sin embargo, desconoce sus propiedades. Por ello, a continuación queremos compartir una lista con sus 10 usos y bondades principales.
#1 Combate retención de líquidos
La sal refinada es una de las causas de la retención de líquidos, pero la sal rosada del Himalaya logra contrarrestar estos problemas debido a su aporte de hasta 10 tipos de oligoelementos diferentes que, cuando se asimilan en el cuerpo, ayudan a estimular las funciones que controlan el nivel de fluidos en los tejidos.
#2 Regula el pH sanguíneo
Una pizca de sal del Himalaya diluida en agua puede ser útil como remedio alcalino para disminuir el exceso de acidez en la sangre. Los minerales esenciales que posee ayudan a restablecer el pH natural de nuestro organismo, evitando enfermedades crónicas y reacciones inflamatorias.
#3 Aumenta los niveles de energía
Este ingrediente natural posee antioxidantes y electrolitos que aumentan el nivel de energía física y mental de forma natural. Si la diluimos en agua o la integramos en batidos o jugos, mejorará la oxigenación de las células, activará el cerebro para un óptimo rendimiento y fortalecerá los músculos.
#4 Mejora la absorción de los nutrientes
La sal rosada neutraliza la acción negativa de los ácidos en el sistema digestivo, lo que ayuda a mejorar el proceso de absorción de los nutrientes en el cuerpo. Además, la sal fortalece la flora bacteriana del intestino y mejora la capacidad para separar y remover los residuos que nuestro cuerpo no necesita.
#5 Baja la presión arterial
Una dieta alta en sodio puede elevar la presión sanguínea y, en consecuencia, afectar el funcionamiento cardíaco. Pese a esto, la sal rosada puede controlar la hipertensión gracias a que sus minerales regulan los niveles de sodio y estabilizan los latidos cardíacos.
#6 Disminuye la formación de varices
Gracias a su acción relajante y antiinflamatoria, combate la debilidad de las paredes y las válvulas de las venas superficiales. Los minerales absorbidos mediante la piel optimizan el paso de la sangre a través de las venas capilares, evitando su irritación o dilatación. Junto con ello, la sal también tiene la capacidad de mejorar las funciones del sistema linfático, evitando que las toxinas interfieran en la circulación sanguínea.
#7 Combate las migrañas
La asimilación de la sal rosada del Himalaya promueve la segregación de la serotonina, una hormona que reduce el dolor y promueve el bienestar. Asimismo, su efecto antiinflamatorio calma la tensión muscular en la cabeza y disminuye la intensidad de las cefaleas.
#8 Alivia la congestión nasal
Su aplicación externa diluida en agua es un tratamiento alternativo que ayuda a eliminar el exceso de mucosidad en las fosas nasales, lo que permite controlar la congestión. Sus minerales limpian los conductos obstruidos y, gracias a sus propiedades antiinflamatorias, alivia las dificultades respiratoria que vienen como consecuencia.
#9 Combate el acné
Gracias a su textura granulada, esta sal se puede combinar con miel o aceites esenciales para constituir un efectivo exfoliante natural con propiedades astringentes y antimicrobianas. Si la aplicamos como mascarilla casera, limpiará los poros de la piel y removerá los restos de sebo y de células muertas que forman los granos de acné. us ricos minerales nutren las célular del rostro, favoreciendo la regeneración de los tejidos y -en consecuencia- evitando imperfecciones como manchas y cicatrices.
#10 Calma calambres musculares
Gracias a sus oligoelementos, esta sal natural actúa como un reconstituyente muscular que ayuda a calmar y prevenir los calambres. Estos nutrientes relajan los músculos contraídos y mejoran su flujo sanguíneo, impidiendo que se resientan durante las actividades de alto impacto físico.
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